Amatsumi Hiko, o también conocido como Wadatsumi es un demonio con más de 1500 años con el fin de proteger los océanos de demonios malignos como el Kraken. Rin Okumura, Yukio Okumura y Shiemi Moriyama lo encontraron en su santuario y le dieron fuerzas para seguir con su labor. Finalmente es derrotado por el Kraken y le deja su legado al Monje Marino.
Apariencia[]
Amatsumi tiene la apariencia de un dragón/ballena gigante bastante viejo con partes muy rugosas. En su cara tiene una X dibujada en su piel. Tiene unos ojos bastante pequeños en comparación con su cuerpo y no los tiene del todo abiertos. Encima de su cuerpo, tiene como unas "chimeneas" bastante peculiares. Además de todas estas características también posee unas grandes aletas a los lados y en la cola para poder moverse.
Personalidad[]
Amatsumi parece ser un demonio bueno que ayuda a mantener la paz en sus territorios y no duda en pedir ayuda si lo necesita como cuando le pidió a Rin que le diera fuerzas.
Historia[]
Tras la breve pelea de Rin contra el Kraken, Shura llama a Yukio por teléfono y luego de regañarlos les ordena encontrar el santuario de Amatsumi Hiko, un demonio conocido como Monje Marino aparece y los guía hasta donde este. Al llegar Amatsumi le pide a Rin que lo ayude ya que él, debido a la vejes a perdido fuerza y a ese paso el Kraken lo asesinará.
Shura Kirigakure prepara varias ofrendas y se las envía a Rin para que se la den al Amatsumi, Rin le ofrece comida a Yukio pero este la rechaza y ambos comienzan a discutir Shiemi los detiene. Cuando ella se va Rin regresa y se disculpa con Yukio por lo ocurrido y le pide que le deje usar sus Llamas Azules. Shiemi Moriyama estaba sentada en otro lugar cuando es atrapada, Amatsumi advierte la presencia del enemigo y le pide a Rin y Yukio que salven a Shiemi mientras él se ocupa del enemigo.
Aparece el Kraken con Shiemi en uno de sus tentáculos, esta logra liberarse gracias a la ayuda de Nii, quien se adquiere una forma más grande. De esta forma los exorcistas se deciden a atacar, pero mientras Amatsumi Hiko se enfrenta a el demonio marino, pero cuando todos pensaban que el protector de las aguas había ganado, el Kraken lo hiere gravemente. Así, una de las habilidades del Kraken se activa, la Imitación del Escupitajo, la cual es una técnica del agonía de este, multiplicándose. Así comienza un batalla, en donde todos los exorcistas presentes participan, lo que acaba con el Kraken derrotado, luego de haber sido eliminado el verdadero, de entre ellos. Así muere Wadatsumi, quedando el Monje Marino como el protector de las aguas, siendo el demonio más antiguo de esos lugares.